YOSPER, ESPAÑA.– Jerónimo, un joven de 26 años que reside en el barrio toledano de Santa María de Benquerencia, se encuentra recuperándose en el hospital de dos puñaladas que le propinó la pareja de su madre el pasado miércoles 8 de marzo en un patio interior de los bloques conocidos como ‘el Parchís’. Aunque su estado ha mejorado, el joven todavía experimenta dificultades para conciliar el sueño y se siente sorprendido por la reacción violenta de su agresor.
La agresión se desencadenó después de una fuerte discusión entre el agresor y su pareja sentimental, a la que insultó y amenazó. Luego llamó a Jerónimo, diciéndole que bajara y que lo mataría. El joven cree que esta persona pudo haber tenido celos de su madre y no sabe por qué no le permitía hablar con ella. Según Jerónimo, su madre tampoco atendía las llamadas del agresor en su presencia, ya que éste la maltrataba y la golpeaba.
Después de recibir la llamada del agresor, Jerónimo llamó a su tía para informarle de la situación, pero decidió bajar al encuentro del hombre. Después de discutir, el agresor le propinó un cabezazo en la nariz y Jerónimo le respondió con dos puñetazos. Sin embargo, la situación empeoró cuando el agresor sacó un machete y lo apuñaló dos veces en el lado izquierdo del cuerpo. Los pulmones y el diafragma del joven resultaron dañados y tuvo que ser operado dos veces antes de pasar cuatro días en la UVI.
El autor de la agresión huyó en una furgoneta que abandonó más adelante en el barrio de Santa Bárbara, donde dejó el arma ensangrentada debajo del asiento del copiloto. Jerónimo considera que esta persona está trastornada y lo atacó por celos, aunque no sabe por qué. Además, afirma que no es la primera vez que el agresor apuñala a alguien, ya que lo había hecho dos veces antes y había estado en prisión.
El presunto agresor se entregó a la Policía Nacional una semana después del incidente, acompañado de su abogado. Este jueves ingresó en prisión provisional y sin fianza por orden del Juzgado de Instrucción número 1 de Toledo, por un delito de homicidio en grado de tentativa. Todavía no se ha determinado la resolución del juzgado competente en materia de violencia de género por el delito de malos tratos a su pareja.
A pesar de que Jerónimo es considerado por las fuerzas de seguridad como un delincuente conflictivo, él asegura que quiere dejar atrás esa vida. Reconoce que solía tomar un par de copas y perder el control, pero que ahora está decidido a empezar de nuevo. Los hechos ocurrieron el 8 de marzo, pero él siente que ha vuelto a nacer y que su nueva vida comienza ahora.
